Cuando la Hermandad del Rocío de Antequera cuenta los días para realizar su peregrinaje al Rocío, este domingo ha realizado su su pregón rociero en la Iglesia de San Miguel. «Ya huelo a Rocío, ya huele a azahar».
Este año le ha puesto la voz a este emotivo acto Marcos Cañadas, Hermano Mayor de la hermandad del Rocío de Sevilla, ya que los rocieros antequeranos cada año se trasladan hasta Sevilla para iniciar su camino con esa hermandad.
El pregón ha comenzado de la mejor manera, con cantes del coro rociero a su “blanca paloma”. La presentación del pregón estuvo a cargo de José Manuel Cantos, presentador del pasado año, que tras comentar la larga vida cofrade del vigésimo primer pregonero, entregado a las cofradías, entregó un libro con documentación del pasado familiar de Cañadas y en el que se fundieron en un enorme abrazo.
Nada más tomar la palabra, el pregonero emocionado, y haciendo algún que otro parón, ha contado con palabras quebradas su primer acercamiento a la Virgen del Rocío. “He querido hacer pública mi fe, que hasta el momento nadie conocía, ni siquiera mi mujer”, expresó emocionado. Historia que según explicó quiso contar en este momento porque así lo sentía, porque estaba rodeado de amigos.
Bonitas palabras para la Hermandad antequerana la que tuvo el sevillano, con raíces antequeranas, deseándo a los jóvenes rocieros que algún día serían independientes. Un discurso volcado en el aniversario de la Hermandad, que este año cumple su cuarto de siglo realizando el camino hasta la aldea almonteña.
Tras esto, a los rocieros de Antequera solo le queda esperar la que llegue la Romería del Rocío el próximo 4 de junio, romería que llevan esperando con fervor todo un año. Y como dijo la conductora del pregón: “Rocío es lo que he vivido y Rocío es lo que quiero vivir”.
