Los jugadores verdes se precipitaron en su jugada, fallaron el lanzamiento y aún quedaban 15 segundos que el Caserío sí supo aprovechar
No fue justo el balonmano en la tarde del sábado 15 de febrero con el Club Balonmano Dólmenes Antequera. Los verdes dominaron casi todo el partido ante uno de los mejores equipos de la División de Honor Plata hasta el minuto 50, momento en el que todo se apretó. El Dólmenes tuvo posesión para ganar el partido, pero pecó de impaciente y finalmente el Caserío forzó un siete metros en el último suspiro, el cual fue anotado por Ángel Pérez. El resultado acabó 26 a 27 para los manchegos.
El inicio del choque estuvo marcado por los pocos goles anotados y la expulsión de Aitor. Último minuto y anotaba Jeremy Figueredo el 26 a 25. Responde Ángel Pérez con un gol exquisito de vaselina desde los siete metros (26-26). Quedaba 30 segundo y el Dólmenes tenía posesión para ganar, pero no salió nada bien. Los jugadores verdes se precipitaron en su jugada, fallaron el lanzamiento y aún quedaban 15 segundos que el Caserío sí supo aprovechar para forzar un siete metros que no falló Ángel Pérez de nuevo.
Las defensas se imponían claramente en el juego, llegando al minuto 10 con un resultado de 3 a 3. Fue en ese momento cuando el Dólmenes logró abrir distancia con su rival con Jota Abad y Gustavo l Delgado muy acertados. Llegaron los verdes a ponerse cuatro goles arriba (12-8), aunque finalmente el Caserío recortó brecha y el partido se fue al descanso 13 a 10.
En la segunda mitad, el Caserío entró bien al juego, pero el Dólmenes supo mantener la calma, sostenido en gran parte por un Fernando Torres inmenso en portería. El partido se apretaba con el paso de los minutos, llegando el Caserío a ponerse por delante. Se alternaban esa ventaja en el marcador llegando 23 a 23 al minuto 55. Cualquiera podía ganar.
Último minuto y anotaba Jeremy Figueredo el 26 a 25. Responde Ángel Pérez con un gol exquisito de vaselina desde los siete metros (26-26). Quedaba 30 segundo y el Dólmenes tenía posesión para ganar, pero no salió nada bien. Los jugadores verdes se precipitaron en su jugada, fallaron el lanzamiento y aún quedaban 15 segundos que el Caserío sí supo aprovechar para forzar un siete metros que no falló Ángel Pérez de nuevo.
Quedó una evidente tristeza en el vestuario y la afición. El Dólmenes Antequera mereció ganar tras lo visto en la pista. Las sensaciones son muy buenas, de clara mejoría. Ahora llega una nueva semana en la que se espera que comience a entrenar el último refuerzo, Javi Ariño.
La próxima cita (jornada 21 ) de los pupilos de Carlos Pastrana y José Sevilla será en la Ciudad Deportiva Joan Gamper, el feudo del Barça Atlètic, el domingo 23 de febrero a las doce y media.
