El Ayuntamiento de Campillos ha sufragado, hasta el día de hoy, pagos a proveedores que prestaron sus servicios durante las inundaciones por valor de 248.248,89 euros, de los que 205.570,80 euros han sido financiados con fondos propios. El Consistorio se ha visto obligado a hacer frente a estos pagos “debido a que el Gobierno central aún no ha dado una sola respuesta ni ha prestado la más mínima ayuda a nuestro municipio”, explica el alcalde, Francisco Guerrero.
“Hemos tenido que asumir este cuantioso desembolso para dar soluciones de pago a las numerosas empresas que trabajaron en nuestras calles e instalaciones municipales durante los días más críticos de las inundaciones. Empresas de limpieza, de suministro de utillaje de limpieza, de suministro de agua y otras muchas que pararon su actividad para poner todo su dispositivo al servicio del Ayuntamiento para ayudar a devolver a Campillos a la normalidad”, añade el alcalde. Guerrero asegura que actualmente continúan llegando al Consistorio facturas de trabajos derivados de la riada, “por lo que esta cifra de gasto va a seguir aumentando en las próximas semanas”.
El pasado 20 de enero se cumplieron tres meses desde que se produjeron estos trágicos sucesos. “Entonces, el Gobierno tardó dos semanas en declarar la zona como gravemente afectada por una emergencia de protección civil (zona catastrófica) y aún hoy no ha puesto ni un solo euro para dar respuesta a los vecinos de los municipios afectados, entre ellos Campillos”, asegura Guerrero, quien se muestra convencido de que el presidente del Gobierno, Pedro Sánchez, “continúa inmerso en los cálculos electorales y otros asuntos de menor entidad que ayudar a poblaciones que han sido duramente castigadas por unas terribles inundaciones como fueron las del pasado mes de octubre. Ni siquiera se ha dignado a dar una respuesta a la solicitud de reunión que hicimos el pasado mes de diciembre. Tampoco ha contestado la Ministra de Hacienda a otra petición de reunión realizada por representantes de Unidos Podemos en el Congreso. Desde Campillos consideramos estas actitudes y esta ausencia total de respuestas una falta de respeto del presidente del Gobierno para con nuestro pueblo”.
A día de hoy, hay muchísimas personas afectadas en sus viviendas, en comercios, en la agricultura y la ganadería, además de los numerosos daños existentes en infraestructuras públicas, “y el Gobierno sigue sin dar respuestas. Ante esta situación, el equipo de gobierno plantea volver a la movilización para reivindicar justicia con las personas damnificadas por las inundaciones”. El alcalde considera “penoso” que un pueblo “se tenga que movilizar para recuperar lo perdido por una tragedia de la que no tiene culpa. La respuesta que estamos recibiendo o, mejor dicho, la no respuesta, no está a la altura de un Gobierno responsable. Hay que hacerle saber a la ciudadanía que el Gobierno de España está dejando desamparadas a muchas personas de este país. Pedro Sánchez debe dar la cara y explicar qué piensa hacer con los pueblos castigados por las inundaciones. Es lo mínimo que debe hacer el presidente de un país que presume de estar entre los más avanzados de Europa”.
Hasta el momento, la única administración que ha respondido económicamente para paliar los daños provocados por las inundaciones en Campillos ha sido la Junta de Andalucía, que ha ingresado 420.000 euros para el arreglo de infraestructuras públicas. De este dinero, una parte se está destinando a financiar los gastos derivados de las averías sufridas en las tuberías de las redes de agua de Peñarrubia y Majavea, que también se vieron gravemente afectadas por las inundaciones, lo que provocó que el pueblo se quedase sin agua durante varios días. Otra parte de estas ayudas servirá para el arreglo integral del acerado de la avenida Gerardo Fernández, desde avenida de la Constitución hasta el arroyo Rincón. La Junta también está llevando a cabo los trabajos de arreglo de cerca de una treintena de caminos rurales de Campillos que se vieron gravemente dañados por las fuertes lluvias caídas entre el 20 y el 21 de octubre.
