La Confederación Española LGBT COLEGAS quiere denunciar la bajada de la guardia en prevención por parte del colectivo gay cuando se está celebrando el Día Internacional de Lucha contra el VIH/SIDA.
“Una de cada 3 personas seropositivas lo desconoce, poniendo en peligro su salud y la de otras personas. Hasta un tercio de las muertes relacionadas con el VIH son consecuencia de un diagnóstico tardío”, declara Paco Ramírez, presidente de COLEGAS.
“El colectivo gay indudablemente está bajando la guardia. En España la mayoría de las nuevas infecciones de VIH son se producen entre hombres que tienen sexo con otros hombres (HSH) llegando al 51%, y al contrario que en otros grupos de riesgo parece ir aumentando en los últimos años. Esto es debido a la excesiva disminución de la percepción de riesgo, ya que los nuevos tratamientos invisibilizan la infección y sus señales, y sobre todo que se ha pasado de una sentencia probable de muerte a una ‘enfermedad controlable’ si se diagnostica a tiempo”, declaran desde COLEGAS.
“Muchos hombres no saben que son portadores del VIH y continúan manteniendo relaciones desprotegidas, por lo que transmiten el virus sin saberlo y se arriesgan a desarrollar la enfermedad. No son conscientes de la importancia del diagnóstico precoz del VIH, y deben considerar rutinario hacerse al menos UNA VEZ AL AÑO la prueba de VIH”, declaran.
“Desde COLEGAS animamos a todos los hombres que tienen sexo con hombres a que usen preservativo siempre en todas sus relaciones sexuales, y a que se hagan la prueba de VIH al menos una vez al año. Una detección a tiempo puede significar la delgada línea entre la muerte y un control de la infección”, añaden.
“También animamos a que se hable sobre fidelidad en el ámbito de la pareja, y que las parejas sigan usando el preservativo siempre hasta que no haber abordado el tema de forma explícita”, aconsejan a las parejas gays.
“Por último recordamos la existencia del denominado período de ventana, dónde se debe esperar de 3 a 4 meses para poder detectar el virus tras la infección en una práctica sexual de riesgo”, concluyen.
