ANTEQUERA | NECROLÓGICA
La Cofradía de Nuestra Señora de la Soledad, Quinta Angustia y Santo Entierro de Antequera despide junto con sus familiares y amigos a la Camarera de Nuestra Señora de la Soledad.
El pasado fin de semana fallecía en Madrid, doña Blanca Cerezo de Luna, viuda de don José García Berdoy. Hasta hace algunos años doña Blanca estuvo residiendo en su casa de Cuesta de los Rojas que comunica con Cuesta de Barbacanas. Lugar de preferencia para ella cuando se asomaba al balcón a la hora del paso de «su» Cofradía por Cuesta de los Rojas.
Doña Blanca Cerezo de Luna tenía 88 años y será incinerada para trasladar sus cenizas y celebrar solemne Eucaristía de Despedida hoy martes 24 de enero a partir de las 17.45 horas en la Iglesia conventual de Las Descalzas, donde descansará en el columbario con los restos de su marido.
Compartió con su esposo su gran labor desarrollada en la ciudad de Antequera, de trayectoria industrial y generando múltiples puestos de trabajo. Siendo su fábrica de mantas la última que cerró en la localidad. La familia Garcia-Berdoy tiene una trayectoria industrial y comercial de primera línea, fue un elemento principal en la creación de la Caja de Ahorros de Antequera, y también del Cine Torcal.
Ha enseñando a querer a toda su familia a los Sagrados Titulares de la Hermandad, en especial, a Nuestra Señora de la Soledad. Siendo su familia conservadora del patrimonio de la Hermandad del cual «comenzó a desprenderse» a partir del año 1988 colaborando en la reorganización de la Cofradía para que sea lo que hoy día puede verse cada Viernes Santo por las calles de la localidad.
Durante años conservó dicho patrimonio en el que ella denominaba como «habitación de la Soledad» conservando con el máximo cariño todos sus enseres, así como enseñando a los cofrades su conservación con mimo y cuidado, como los consejos a la hora de guardar el manto, o su preferencias para ataviar a Nuestra Señora para su salida procesional de cada Viernes Santo.
Desde esta semana, Doña Blanca, conservará y cuidará de los cofrades que cuidan de Nuestra Señora de la Soledad muy atenta desde el cielo para no perderse ningún detalle de sus Estaciones Penitenciales, y estos, a su vez, seguirán teniéndola en el recuerdo como Camarera Honoraria (cargo que le fue otorgado hace algunos años).
